Educación en zonas rurales
En 2001, Estela fue nombrada directora de la Escuela Rural 66, de Costa Uruguay Sur. Cuando conoció las necesidades de sus alumnos, decidió convertir las aulas en un polo de contención y educación. Creó alianzas con diversas organizaciones para mejorar la educación y la vida de sus chicos.
Su sueño actual es levantar un centro de salud para la comunidad escolar. Además, paga el abono de Internet mensual para que alumnos y ex alumnos puedan conectarse. Vive a metros de la escuela y tiene un modo de llevarse con los chicos y sus familias que la convierten en amiga, aliada y defensora.
Fue impulsora del comedor escolar y fue el nexo que permitió la llegada de la luz, las estufas y otras restauraciones de infraestructura. Implementó un taller de costura para las madres de la comunidad educativa y un programa de educación en valores para que padres e hijos interactúen con la literatura como marco.
“Mi forma de ser y sentir, mi infancia en el campo y venir de una familia muy humilde, me han formado para servir a los demás”: Estela hizo de la escuela y de sus alumnos la causa de su vida, encarando proyectos que exceden su rol como docente.