Necesidades básicas y contención
Anabella fundó en 2015 la Asociación Civil Suma de Voluntades con el objetivo de acompañar y apoyar a familias en situación de extrema vulnerabilidad que viven en asentamientos informales de los barrios de Paraná. Realizan actividades como acompañamiento escolar y deportivo, construcción de viviendas, emprendimientos cooperativos y comedores comunitarios que ayudan a fortalecer las capacidades de las familias que más lo necesitan.
Con el agravamiento de la crisis social, muchos hombres y mujeres perdieron su trabajo y buscan recursos en la basura para alimentar a sus familias. Gracias a Suma de Voluntades, se encuentran dando sus primeros pasos en la organización del grupo “Recicladores del Paraná” en busca de un horizonte de esperanza y generando fuentes de trabajo.
Junto a su equipo de más de 140 voluntarios, entregan 1900 raciones de comida por semana entre sus tres comedores de los barrios San Martín, Antártida Argentina y Mosconi Viejo y las recorridas nocturnas. Además, más de 1300 familias y 430 niños y niñas reciben acompañamiento escolar tres veces por semana y participan de la construcción de canchas de fútbol barriales con el fin de alejar a los niños de los peligros de la calle. Por otra parte, llevan adelante el proyecto “Construir Dignidad” a través del cual las familias construyen sus casas, interviniendo en todo el proceso desde la fabricación de bloques hasta su edificación.
La educación y el fomento de la cultura del trabajo son los cimientos de cada una de las actividades que desarrollan para que las familias paranaenses vivan mejor, puedan superarse y tengan nuevos caminos de bienestar para lograr un mundo más equitativo sin la vulneración de sus derechos. “Cada vez que suceden cosas en nuestro camino hacen que sigamos creyendo que la magia existe y que la realidad puede ser transformable. Estamos seguros que los sueños colectivos tienen una fuerza imparable”.